Abajo y de izquierda a derecha:
Antonio, María Dolores, Álvaro, Carla, David, Marta.
Arriba y de izquierda a derecha:
María, Salva, Fran y Manuel
Y a pesar de faltar ese día parte de la plantilla (concretamente 7) os eché de menos.
A pesar de vuestra corta edad habéis sido grandes maestros, SOIS UNICOS, no conozco a nadie que enseñe tanto en valores como estos grandes monstruitos.
- Especialistas en mostrar el esfuerzo y constancia, cada día, para devoraros ese terror por el agua que invadía cada milímetro de vuestro cuerpo para concluir unas clases llenas de risas. Gracias a vosotros mi oído se agudizaba al igual que mi visión. Vuestra valentía os impulsaba a saltar al agua(a pesar de estar a 75 m. de profundidad), al igual que los grandes piratas zarpan al mar, sin miedo a nada y con ganas de conseguir el tesoro más grande del mundo. Por lo tanto, deciros una infinidad de veces no os tiréis si no estamos nosotras… no os servía de nada.
- Conseguí entender vuestro idioma tan avanzado obteniendo una gran calificación y solo por vosotros nunca olvidaré la palabra “SEÑO” .
- Mil anécdotas y aventuras que hemos vivido juntos, hacer frio y meternos en el agua no era nada para nosotros nos esperaba una aventura nueva cada dia.
- Manuel calienta…. O seño cuando nos vamos a la chiquitita…. Marta mira que chuli esta la tabla, pruébala … Mil frases que anheló con gran cariño.
- Y si gracias a vosotros soy cada vez mas niña… sacasteis toda la niñez que había en mí y a pesar del transcurso de los días sigo practicando vuestro vocabulario, a resaltar la creatividad, ha hacer mis sueños realidad y a vivir en un mundo alejado de problemas, en un universo donde los problemas se convierten en obstáculos o retos que tenemos que saltar o alcanzar.
- Y todo esto lo hemos sufrido una gran deportista ( Diana) y una mera servidora
- Gracias por vuestra despedida, con vosotros aprendí que no es bueno echar cubos de agua a 9 monstruitos. Todos juntos me mostrasteis un lazo de unión entre compañeros por ese gran lazo terminé sumergida en una gran guerra de cubos de agua.
Pero a pesar de vuestro egoísmo durante todo el verano por zarpar juntos, desde el principio, en grandes aventuras, fui capitana de de otros nakamas, otros que al igual que vosotros eran mis nakamas.
- Aprendí con Irene una técnica curiosa en estilo de braza… una forma curiosa de poner las manos para ver el estado en que se encuentra la pintura que cubre las uñas.
- Gracias a la aventura del aparato digestivo aprendimos a coger el barril en crol y así avanzar en la respiración.(Que grande ese dia).
- A escuchar “ he tenido un mal día , porque no me gusta lo que he comido hoy”
- También hemos contado con grandes nakamas en las que todos los días sus lagrimas y /o llantos eran nuestro pan de cada día pero consiguieron esa transformación y deslizarse en el agua como grandes pececitos. Ha sido todo un placer tener que tirarme al agua para rescataros. =)
Muchas aventuras vividas que nunca olvidaré… pero el año que viene volveremos a zarpar como grandes piratas para embarcarnos nuevas aventuras.
